Tras documentar las plantas, me pregunté a mí mismo: ¿de dónde vendrá toda esta sabiduría medicinal? En la India se escribieron muchos libros sobre el cuidado de los elefantes. Pero muchas de las plantas que me enseñaron aquí no estaban en aquellos libros. ¿Procedía toda esa información sobre el uso de las plantas medicinales de la medicina humana?

Aprendimos que muchas de estas plantas se aplican exactamente igual en las personas y en los elefantes. En los tratamientos para las infecciones de ojo, por ejemplo. De hecho, el 55 por ciento de las medicinas para elefantes se usan de manera idéntica en las personas.

Sin duda había otra fuente de conocimiento. ¡Los propios elefantes! Había bastantes plantas medicinales de elefantes que no tenían aplicación alguna en los humanos. Estos animales buscaban las plantas en la naturaleza.

Los elefantes comían hasta un 84 por ciento de estas plantas cuando estaban sueltos y podían elegir su comida. Decidían por sí solos cuáles de estas medicinas tomar. ¿Sabrían que
esas plantas tenían propiedades medicinales?

Demostrar científicamente que los elefantes comen plantas medicinales de manera voluntaria sería complicado. Pero a los mahouts no les preocupaba tener una confirmación científica de lo que ya sabían. Llevaban confirmándolo generación tras generación. Estaban convencidos de que los elefantes comían plantas específicas para tratar problemas específicos.

Según ellos, los elefantes comen hasta 19 especies de plantas diferentes para tratarse a sí mismos de afecciones concretas. ¡Muchas de estas plantas son las usadas por los mahouts en las preparaciones medicinales para estos animales!

Sí, muchas de las medicinas para tratar elefantes tenían que proceder necesariamente de la medicina humana. Pero muchas otras fueron usadas primero por los elefantes y luego por las personas. Otras medicinas seguramente fueron usadas por ambos.

Nuestra perspectiva humana del mundo nos impide ver que otras especies tienen sus propios conocimientos, y que tales conocimientos pueden llegar a ser incluso superiores a los nuestros. Los castores nos han enseñado a construir presas. Nos inspiramos en la forma de las aves para construir aviones. El “biomimetismo” es la ciencia de usar y aplicar las formas y procesos de la naturaleza al diseño de nuevas tecnologías.

Así, los karen han tomado prestada de los elefantes parte de su sabiduría, especialmente sobre plantas. La próxima vez que veas a tu perro o a tu gato comerse una planta en el jardín, presta atención. Quizá esté medicándose. Todavía hay mucho por descubrir sobre nuestros compañeros del reino animal.