El sol desciende entre las hojas a orillas de un río en Australia. Una lombriz se retuerce por el turbio fondo. Está debajo de unos guijarros. La lombriz se esconde de sus predadores.

Este ornitorrinco nada por el agua.

Este ornitorrinco bucea con los ojos cerrados. Ha encontrado una jugosa lombriz.

Junto a la orilla, un cazador de patas palmeadas sale de su madriguera. Se zambulle en busca de comida. Moviendo su pico de pato detecta el pulso eléctrico de una lombriz. Abre la boca, y de una pasada, se lleva la lombriz y un puñado de guijarros. Ya en la superficie, muele la lombriz en la boca hasta convertirla en un puré.


Los guijarros le van cayendo por los lados. Y luego se traga la papilla de lombriz. Este asombroso predador es un ornitorrinco. Es uno de los animales más singulares del planeta. Los ornitorrincos tienen unas características que los distinguen de cualquier otro mamífero. Y la primera de ellas está en su forma de nacer.

Bebé ornitorrinco

Acaba de amanecer en el río. Un ornitorrinco rema con sus patas palmeadas hacia la orilla. Sale del agua a trompicones.


Ya en tierra, repliega las membranas de las patas y entra caminando a su madriguera. Empieza a excavar con sus garras. Hoy está construyendo una nueva cámara junto a la madriguera principal.


Pasa a su interior con el morrillo por delante. Y luego tapa la entrada arrojando tierra con sus patas traseras. Pone un huevo. Luego otro. Y los mantiene caldeados entre el cuerpo y la cola.

Pasadas unas dos semanas, los huevos se abren. De cada de uno de ellos sale un diminuto ornitorrinco rosado del tamaño de un frijol. Sin pelo, ciegos e indefensos emprenden un viaje de varias pulgadas hasta el vientre de su madre. Nada más llegar se aferran a su pelaje y esperan a ser alimentados.


Como todos los mamíferos, los ornitorrincos amamantan a sus crías. Pero a diferencia de los demás, la leche de la madre fluye de entre los pliegues del vientre. Y los bebés chupan la leche del pelo. Empiezan a vivir solos cuando son capaces de nadar y de cazar por su cuenta.

Los ornitorrincos amamantan a sus crías en madrigueras.

Animal Hoax?

En 1799, un ornitorrinco fue llevado por primera vez a Inglaterra. Muchos científicos creyeron que era un bulo. Se pensaba que alguien había remendado partes de diversos animales en uno solo para gastar una broma. ¿Cómo iba a poder un mamífero tener pico y patas palmeadas y, además, poner huevos? ¿Cómo podría un ave tener pelo y dar leche a sus crías? El ornitorrinco era tan diferente a cualquier otro animal, que nadie podía creer que fuera real.

Los huevos del ornitorrinco son del tamaño de una canica.