Como pez en el agua

Con su forma de melón peludo, el ornitorrinco es un gran nadador. Esa forma le permite sumergirse rápidamente.


Los ornitorrincos se propulsan moviendo rápidamente sus manos palmeadas. Usan las patas traseras y la cola a modo de timón y freno. Todo esto explica por qué el ornitorrinco se mueve con tanta elegancia.

En el agua, el ornitorrinco se siente como un pez.

Las grandes patas palmeadas del ornitorrinco le ayudan a impulsarse por el agua.

Sus versátiles patas le ayudan tanto en el agua como en tierra.

pata delantera

¿Manos o aletas?

Las patas delanteras del ornitorrinco están diseñadas para la vida en el agua y en tierra firme. En el agua, las membranas entre los dedos de sus afiladas garras, se despliegan formando remos.

En tierra, las membranas se repliegan. Y de la punta de los dedos, asoman unas afiladas uñas. Uñas para excavar madrigueras.


A diferencia de las patas delanteras, las traseras no se transforman. Su forma palmeada permite al ornitorrinco cambiar de dirección y frenar en el agua. Y en tierra, los ornitorrincos usan los dedos traseros para acicalarse.


Los ornitorrincos macho tienen otra sorpresa en sus patas traseras. ¡Espolones huecos llenos de veneno! Los ornitorrincos usan ese veneno en sus peleas. Y aunque no es mortal, causa inflamación y mucho dolor.

Los ornitorrincos macho tienen espolones huecos en las patas traseras. Están llenos de veneno. Los machos se disputan entre ellos las hembras y el territorio.

La cola del ornitorrinco le ayuda a nadar. Y es también una reserva de grasa.

Cola de castor

Aunque la cola recuerda a la de un castor, el ornitorrinco, a diferencia de aquel, no la usa para impulsarse ni para comunicarse. Esa cola aplanada es en realidad una reserva de grasa. Alberga casi la mitad de toda la grasa corporal del animal.

Y ahora mira esto

Los ojos del ornitorrinco tienen diversos receptores de color. Y eso que no usa los ojos para cazar. Esos receptores le sirven tanto en el agua como en tierra firme para localizar mejor a sus posibles predadores.


Cuando se sumerge hasta el fondo, el ornitorrinco cierra los ojos con fuerza. El pelaje de los párpados es mucho más claro que el pelaje oscuro que recubre el resto de su cuerpo. Y por eso cuando bucea, parece que le lucen los ojos.


El ornitorrinco es el fruto de millones de años de adaptaciones. Puede que esta combinación de rasgos nos parezca un disparate, pero para el ornitorrinco ha sido la clave de su supervivencia.

Como el ornitorrinco tiene la piel más clara en los párpados, al bucear parece que le lucen los ojos.