Como pez en el agua

Con su forma de melón peludo, el ornitorrinco es un excelente nadador. Su forma le permite abrirse paso hacia el fondo de los ríos rápidamente en busca de moluscos, lombrices y pequeños insectos.


Los ornitorrincos se propulsan moviendo rápidamente sus manos palmeadas. Y usan las patas traseras, así como su cola aplanada de castor, a modo de timón y freno. Gracias a esa combinación de forma corporal, patas palmeadas, pelaje compacto y cola aplanada, el ornitorrinco se mueve por los ríos como pez en el agua.

Las grandes patas palmeadas del ornitorrinco le ayudan a impulsarse por el agua.

pata delantera

Pero sus versátiles patas le ayudan tanto en el agua como en tierra firme.

¿Patas o aletas?

Las patas delanteras del ornitorrinco están diseñadas para la vida en el agua y en tierra firme. En el agua, las membranas que tiene entre los dedos de sus afiladas garras se despliegan y forman sendos remos. Esa superficie adicional le permite al animal propulsarse con fuerza por el agua.

Una vez en tierra firme, sus patas se transforman. Las membranas se repliegan. Y de la punta de los dedos asoman unas afiladas uñas. Esto permite al ornitorrinco caminar por el suelo y excavar madrigueras.


A diferencia de las patas delanteras, las traseras no se transforman… pero también son especiales. Su forma palmeada permite al ornitorrinco cambiar de dirección y frenarse durante sus inmersiones. Y en tierra, usa los dedos traseros para acicalarse. 


Los ornitorrincos macho esconden otra sorpresa en sus patas traseras. ¡Espolones huecos, llenos de un dolorosísimo veneno! Utilizan estas armas tóxicas en sus luchas encarnizadas por el territorio y por las hembras. El veneno no es mortal, pero el pobre que lo reciba sufrirá una inflamación y unos dolores de aúpa durante varias semanas. Donde el ornitorrinco se siente más a gusto es en el agua. Pero sus versátiles patas le ayudan tanto en el agua como en tierra firme.

Los ornitorrincos macho tienen espolones huecos en las patas traseras. Están llenos de veneno. Los machos se disputan entre ellos las hembras y el territorio. 

El ornitorrinco se ayuda de su cola para nadar. La cola es también una reserva de grasa. 

Cola de castor

Aunque la cola recuerda a la de un castor, el ornitorrinco, a diferencia de aquel, no la usa para impulsarse ni comunicarse. Esa cola aplanada es en realidad una reserva de grasa corporal. Cuando hay poca comida disponible, esa cola carnosa, capaz de albergar casi la mitad de toda su grasa corporal, puede salvarle la vida.

Y ahora mira esto

Los ojos del ornitorrinco tienen receptores de color adicionales. Y eso que no usa los ojos para cazar. Esos receptores le sirven tanto en el agua como en tierra firme para localizar mejor a sus posibles predadores.


Cuando se sumerge hasta el fondo, cierra los ojos con fuerza. El pelaje de los párpados es mucho más claro que el pelaje oscuro que recubre el resto del cuerpo. ¡Y por eso parece que sus ojos lucen en la oscuridad!


En las hipersensibles narices de pato del ornitorrinco, en sus membranas retráctiles y en sus espolones venenosos, el ornitorrinco muestra una serie de adaptaciones que ha ido desarrollando a lo largo de millones de años. Puede que esta combinación de rasgos nos parezca un dislate, pero para el ornitorrinco ha sido la clave de su supervivencia.

Como el ornitorrinco tiene la piel más clara en los párpados, parece que le brillan los ojos cuando bucea.